I.
hay días en los que no me la llevo bien conmigo mismo
y camino cabizbajo
con las manos en los bolsillos
la gente
las casas derruidas
las calles
aceras casi ruinas
me abruman
y mi cuerpo me es ajeno
el mundo me es ajeno
me desconozco y me pierdo
me imagino como pájaro en lontananza
como pájaro en vuelo
que busca cielos más amables
al vaivén del viento caprichoso
pero no soy pájaro ni viento ni cielo
voy caminando
y nada soy
y si hace sol el esplendor me agobia
y si hace frío anhelo fuego en mis entrañas
¿será eso lo que llaman tristeza?
¿nostalgia?
¿vacío?
solo bajo la lluvia hallo algo de sosiego
quizás porque me siento en casa
el consuelo de las gotas en mi rostro
purifica el peso del tiempo
ya ni la música me alegra
y busco melodías mórbidas trágicas grises
como cielo bogotano de invierno
y ahí también me siento en casa
II.
solo en días aciagos
la vida se desnuda
se muestra en su pureza
transitoria
voraz
hermosa
y descubro que ese caos que me habita
esa fuerza incontrolable
de la vida desatada
es el camino
la única vía
no hay perfección
sin vértigo
no hay paraíso perdido
los perdidos somos nosotros
porque el paraíso está ahí
atrás adelante adentro
saborear el caos
los pequeños infiernos cotidianos
las emociones sin fuero
eso es el paraíso
si debo perder
perderme
para comprender
bienvenida la pérdida
el duelo
y la tristeza
pues sin abandono
no hay sabiduría
La sombra del tiempo son los recuerdos del pasado... siempre siguiéndonos,
ResponderEliminarpero a la luz de un nuevo día se pierde para volver furtiva al anochecer.